Senadora mexicana pide a su embajador "desactivar" conflicto por caso Medusa en República Dominicana
La senadora mexicana Alejandra Lagunes le habría pedido al embajador de su país "desactivar" el conflicto por el caso Medusa en República Dominicana. |
Por Liz Asencio
Revista Dominical Dejando Huellas
La senadora mexicana Alejandra Lagunes habría solicitado la intervención del embajador mexicano en República Dominicana, Carlos Miguel Aysa González, para "desactivar" el conflicto en el que se ha visto envuelta luego de que la mencionan en presuntas actividades de lavado de activos en el caso Medusa.
El embajador mexicano en República Dominicana, Carlos Miguel Aysa González. |
La investigación de la Procuraduría Especializada en Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA) establece que Lagunes trabajó para promover la imagen del exprocurador dominicano Jean Alain Rodriguez Sánchez.
La investigación del caso Medusa establece que al equipo liderado por la senadora Lagunes le habrían pagado más de US$2 millones de dólares en asesoría para promocionar la imagen del entonces procurador Rodríguez Sánchez. Los fondos habrían salido del presupuesto de la Procuraduría General de la República Dominicana.
De acuerdo con publicaciones en la prensa dominicana del expediente del caso Medusa, la PEPCA, liderada por Wilson Camacho, asegura que utilizarán la cooperación internacional para proporcionar la información a las autoridades mexicanas.
"El Ministerio Público tiene pruebas de pagos millonarios en dólares realizados mediante operaciones de pitufeo a la hoy senadora Lagunes, a quien esta investigación ha dejado fuera de las imputaciones por evidentes razones procesales, pero usará los canales oficiales de cooperación jurídica internacional, para poner a disposición de las autoridades mexicanas los graves hallazgos que se encuentran bajo la custodia del Ministerio Público dominicano", dice la acusación.
Además establece que "al equipo de los mexicanos se les pagaba una dieta de los recursos de la Procuraduría y además se le asignó un bien incautado para vivir y se les pagó con fondos público más de dos millones de dólares (USD$2,000,000.00); el órgano acusador tiene pruebas de cómo el acusado Jean Alain Rodríguez Sánchez utilizó mecanismo de pitufeo para lavar activos y su influencia para que el equipo que trabajaba para Lagunes, que entraban salían con frecuencia de la República Dominicana, utilizaran el salón de Embajadores del Aeropuerto Internacional de las Américas".
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