Experto sugiere medidas al gobierno dominicano ante una posible recesión en Europa y Estados Unidos
Revista Dominical Dejando Huellas
El exgobernador del Banco Central de República Dominicana, José Löis Malkun, advirtió al gobierno estar atento ante una posible recesión económica que se ve venir en Europa y Estados Unidos. El experto augura que, sí sucede en Estados Unidos, su impacto de inmediato se refleja en Europa.
Para República Dominicana, esto representará un descenso en la llegada de turistas, tomando en cuenta que Norteamérica representa la mayor fuente de turismo para el país caribeño.
El economista José Löis Malkun, exgobernador del Banco Central de República Dominicana. |
Malkun puntualizó que esa posible recesión lo advierte el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, y lo dicen empresarios de alto relieve cómo los multimillonarios Warren Buffett y Bill Gates, quienes están vendiendo acciones para invertir en activos fijos.
El experto sostuvo que cuando una economía cae, como cayó la estadounidense un 1.4 % interanual en el mes de abril respecto al año anterior, todavía no hay recesión. Pero si en el mes de mayo vuelve a caer un 1 % o un 2% y después en junio y julio cae de nuevo, entonces sí se puede decir que la economía entró en recesión.
Expresó que, si la economía de Estados Unidos entra en recesión, afectará a República Dominicana de manera directa. Ya que la economía quisqueyana tiene mucha dependencia de lo que pasa en la unión americana. Una recesión estadounidense podría reducir las remesas y el turismo, y afectar las zonas francas y las inversiones en otros sectores importantes.
Malkun resaltó que esa situación sería catastrófica para República Dominicana, porque la recesión estadounidense arrastra a los países de la Unión Europea y a muchos de América Latina.
"Todos los sectores que dependen de componentes externos se verán afectados, las remesas pueden disminuir, pero no van a desaparecer; el turismo se puede afectar, pero siempre hay sectores con mucho dinero y pueden seguir haciendo turismo", explicó Malkun.
Al ser entrevistado por Onorio Montás para la "Revista Dominical Dejando Huellas", el exgobernador del Banco Central expresó que la economía dominicana en el mes de marzo estaba proyectada a crecer más de 5%, y afortunadamente creció 6.1%.
No obstante, cayó a 5.8% en mayo y probablemente siga cayendo en los próximos meses. Lo más importante, destacó el economista, es mantener la estabilidad cambiaria y la macroeconomía en general.
Ahora bien, "si la guerra entre Rusia y Ucrania se extiende, no se sabe lo que pueda pasar y eso va a afectar a todo el mundo", puntualizó.
Malkun indicó que la situación de la guerra está afectando los suministros de las materias primas, como gas, petróleo y granos, lo que va a generar escasez y ya, la política monetaria de los bancos centrales de todo el mundo está aumentando las tasas de interés. En República Dominicana, por ejemplo, estaba en 7% y ya anda por 10%; la idea es bajar la demanda, y eso encarece el crédito.
En cuanto a la política de alimentaria, el exgobernador del Banco Central está de acuerdo con que el gobierno dominicano mantenga el subsidio a los combustibles y las materias primas para producir alimentos, ya que, de no aplicar esa política, un galón de gasolina estuviera costando RD$400 pesos y se está comprando en RD$293 pesos.
Explicó que, gracias a la política de subsidios y los programas sociales del gobierno, así como las ventas de INESPRE, la población se está abasteciendo de productos de la canasta básica a precios asequibles.
Sobre el tema de la agricultura, dijo que el problema de República Dominicana es un asunto de competitividad, "porque somos un país pequeño, por ejemplo, aquí se podría traer arroz de Tailandia y otros países y sale más barato, pero hay que proteger a los productores".
El economista agregó que el sector agrícola dominicano hay que dotarlo de tecnología, ya que para ser competitivos no se puede seguir produciendo con el método de los años 60, y habría que reducir el minifundio para producir en grandes extensiones de terrenos, lo que implicaría aplicar una política agroindustrial a gran escala.
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