Header Ads

Las mujeres de bajos ingresos son más propensas a sufrir de depresión

Un estudio efectuado por investigadores de la Universidad de California, entre 121 mujeres entre los 18 y 45 años que viven en la pobreza encontró que más del 45% de las encuestadas padecían de depresión

Por Norma De la Vega
Universidad de California

DAVIS, California - Las mujeres de bajos ingresos están en mayor riesgo de sufrir depresión, en comparación a mujeres de otros niveles económicos; y la mayoría no están recibiendo tratamiento médico por lo que las consecuencias pueden ser devastadoras.

Un estudio efectuado por investigadores de la Universidad de California, entre 121 mujeres entre los 18 y 45 años que viven en la pobreza encontró que más del 45% de las encuestadas padecían de depresión.

El estudio estuvo a cargo de dos nutricionistas, Amy Block Joy de Extensión Cooperativa en la Universidad de California – Davis, quien investiga las consecuencias de la pobreza, y Mark Hudes, experto en estadística del Departamento de Ciencias de la Nutrición y Toxicología en Berkeley.

El estudio no sólo examinó aspectos sociales que podrían incidir en la depresión, como lugar de residencia, lenguaje, etnicidad y pobreza. También se enfocó en aspectos de la nutrición, concretamente se analizó el consumo de ácido fólico entre las encuestadas, una vitamina que ayuda al bienestar emocional.

Block dijo que el propósito de la investigación llevada a cabo en cinco condados entre mujeres en edad fértil fue concientizar a la población de que la depresión es un problema de salud importante y que hay recursos gratuitos en todos los condados para combatirla.

"En estos tiempos de crisis económica todo mundo está afectado por el estrés y la angustia, pero las personas de bajos recursos corren un doble riesgo de caer en depresión", señaló Block.

El experto dijo que el tema de la depresión, entre mujeres que viven en condiciones de pobreza, no se ha investigado con profundidad a pesar de que es un problema serio de salud. Es más, las consecuencias pueden ser devastadoras: baja la autoestima y puede causar enfermedades crónicas y relaciones conflictivas. Peor aún, la depresión afecta a toda la familia.

La encuesta se desarrolló en inglés y español en cinco condados de California. En Fresno y San Diego todas las participantes respondieron en español; mientras que, en Sonoma, Shasta y Trinity, quienes participaron eran de distintos grupos étnicos y respondieron en inglés.

Todas las encuestadas estaban inscritas en algún programa de bienestar social, como el programa federal de estampillas para comida y el programa "Women Infants and Children", conocido por sus siglas como WIC, que ofrece ayuda a mujeres con niños hasta los cinco años.

La investigación trató de determinar si la deficiencia de ácido fólico en la sangre contribuye a la depresión y, aunque no se obtuvieron datos contundentes, se sabe que el ácido fólico es un neurotransmisor que contribuye al bienestar emocional.

Block indicó que las mujeres en edad fértil deben tomar ácido fólico, también conocido como vitamina del complejo B, ácido folínico y folato, pues ayuda a evitar defectos de nacimiento; la nutricionista también lo recomienda para la población en general.

Los alimentos que contienen ácido fólico son los cereales, el pan, el jugo de naranja y la avena, que por lo general vienen fortalecidos con la vitamina. Otros alimentos que también lo contienen son los fríjoles y los vegetales verdes como la espinacas, brócoli y lechuga.

El estudio también encontró diferencias importantes relacionadas con el idioma y el número de personas viviendo en el hogar. Por ejemplo, en Sonoma, el condado donde se registró el mayor índice de síntomas de depresión, todas las mujeres encuestadas hablaban inglés. Mientras que, en San Diego, donde las participantes respondieron en español, se encontró el menor índice de depresión.

Se halló también que el nivel de depresión fue menor entre mujeres que vivían en hogares con familias numerosas. El promedio de habitantes por casa entre las latinas fue de 4.3 personas y 3.3 para las mujeres no-latinas. Por ende, el riesgo de depresión es bajo entre las latinas pues tienden a vivir con familias más numerosas.

"Las mujeres latinas no solo cuentan con la ayuda del clan familiar; además se ayudan unas a otras y es probable que tengan otras redes de apoyo que les permite lidiar mejor con la depresión", dijo Block.

Agregó que la depresión es un problema de salud que tiene tratamiento y la experiencia con las latinas demostró que el sistema de apoyo marca una diferencia positiva por lo que es importante que las mujeres pidan ayuda.

La especialista precisó que el punto clave de la investigación era el de concientizar sobre la depresión para informar a esas mujeres que hay servicios de salud gratuitos en todos los condados. De hecho, todas las encuestadas fueron referidas a algún programa de ayuda gratis.

"Queremos abrir los ojos a la gente", dijo Block y agregó que el primer paso es aprender a reconocer los síntomas de la depresión: pérdida de motivación, irritabilidad, fatiga, cansancio, insomnio, cambios repentinos de humor, falta de concentración, tristeza profunda, cambios en el apetito.

Además, muchas personas que sufren de depresión tienen un alto riesgo de tener ataques de ansiedad, dolores de pecho, palpitaciones, sudoraciones, dolores de cabeza y, consecuentemente, el deterioro de la salud física.

Nota: Este artículo se basa en el estudio "Low-income women are at high risk for depression, a serious health concern", publicado en el Volumen 64, Nnúmero 1, de la edición de enero-marzo 2010 de la revista California Agriculture de la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California.

No hay comentarios

Con la tecnología de Blogger.