Reflexión: Solo estoy viviendo
Por Máximo Caminero
Especial para Mi Tierra News
La ansiedad que nos arropa constantemente se vuelve a escapar por alguna parte de mi cuerpo. Se me enredó como una serpiente sin aviso y de la misma manera "evacuó" sus imprevistos. Me dejó latiendo más débil el corazón y, sin embargo, no sé por qué me siento más fuerte…
Este asunto de vivir se va aprendiendo a jornadas anchas. Uno da un paso y luego otro y termina dando zancadas "que evitan" reconocidos inconvenientes.
Ya no es importante lo que antes era. Ahora uno se da cuenta de que cada latido vale su bamboleo en diamantes. Me caí muchas veces, me sigo cayendo y probablemente el vértigo de los años, me hará caer muchas más ¿Pero saben qué? Ya las caídas guardan almohadas y uno aprende a caer de nalgas.
Los consejos abundan y se intensifican; Haz esto, lo otro, tómate esto y te sentirás mejor, brinca, camina, corre, salta ¡Coño! Ya déjenme tranquilo que lo que estoy "es viviendo". Ya hice todo lo que me dijeron, lo que me pidieron, lo que pensé, lo que quise, lo que no. Fui marioneta del destino, del azar, de mi libre albedrío, de la sincronicidad y de tantas pendejadas más…
No sé si estoy en el lugar que escogí o escogieron por mí. Si estoy con la mujer adecuada o sigue siendo "la errada", de todas formas, solo espero que no lea este latido. He aprendido a aceptar y fluir, a tener paciencia y tolerancia, pero también a «evadir» y explotar en su momento.
Hace años que no lloro, pero no me daría pena hacerlo. Me he "meado" en la cama siendo niño y "una que otra vez siendo adulto". Me emborraché algunas veces y seguro pasará eventualmente. Sigo equivocándome constantemente, aunque estoy tratando de eliminar "la especulación".
Me imagino que a muchos de ustedes les habrá pasado "algo" de todas estas chochadas que les cuento, sí, al fin y al cabo, ¡Todos! Somos humanos sosteniendo una experiencia de vida. Aquí los defectos y virtudes podrían "destacarse" más en unos que otros, pero al estrechar la brecha salimos, sin excepción, por la misma brecha.
No importa el idioma que hable o el país donde haya nacido, usted experimentará las sensaciones "insertadas" en la computadora "Homo sapiens" a la que están programadas; las angustias, penas, alegrías, goces, desvelos y todas las demás emociones buenas o malas.
Le tocará la pobreza o la riqueza, la bruja o la princesa. Será culto o necio, neófito o hábil. Gozará de mala suerte o le tocarán los mejores bocados y bailes. Uno no sabe, uno solo está viviendo que, al meditarlo mejor, realmente estamos aprendiendo a vivir. No es fácil, pero nadie nos dijo que lo sería. ¿O sí?
La canción de Litto Nebbia, "Solo se trata de vivir", cantada por Mercedes Sosa, resume en cuatro minutos toda esta perorata de este latido. "Creo que nadie puede dar una respuesta, ni decir que puerta hay que tocar".
Por ahí vamos, dando lo mejor que podemos dar. Gestos que construirán o destruirán relaciones, que enriquecerán o desvirtuaron nuestros sentidos. Nos toca elegir entre el camino del amor, la lujuria, los complejos y demás. Nos toca elegir entre el bienestar o el desapego.
No tendremos todas las opciones que aspiramos alcanzar, sin embargo, sí tenemos la capacidad de dar sin tener que gastar nada. Precisamente, todo lo que es realmente valioso en la vida, está «injertado» en cada uno de nosotros. No nos costó nada, pero hay que dejarlo que salga, el amor es el propósito de la vida.
La próxima vez que se sienta presionado, sólo levante su rostro y diga sonriendo "solo estoy viviendo", verá que el efecto será sanador, pues nos concientiza, momentáneamente, de que, en verdad, la vida es una tragicomedia, que "solo estamos viviendo". ¿O es loco que estamos? ¡Salud! Mínimo Caminero.
Máximo Caminero es un reconocido escritor y artista plástico dominicano residente en West Palm Beach, Florida.
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