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Lalo Rodríguez, el gran salsero boricua en tres movimientos

Por Alexis Méndez
Especial para Mi Tierra News

El salsero puertorriqueño Lalo Rodríguez fue un gran artista de la música tropical. Pero el martes, 13 de diciembre, simplemente lo olvidamos... Nos enfocamos en difundir la noticia, en querer dar la primicia. Porque ahora, todos preferimos ser difusores de información antes que mantenernos informados. Lo cierto es que debimos bajarle al morbo y pensar en lo que perdimos… El gran cantante que se nos fue.

Especulamos en torno a cómo murió. Tenía 64 años. No hubo un suspiro de tristeza. Pero encendimos una ráfaga de inmediatez que, sin pensar en su familia y amigos, motorizó el tráfico de aquellas nefastas fotos y videos de la farándula más rosa. La realidad es que, sí, fuimos odiosos, insensibles, malagradecidos, inhumanos, egoístas, patanes merecedores de no volver a escuchar la voz de Lalo Rodríguez, la que nos quedó grande.

A continuación, tres movimientos de ese concierto que significó su trayectoria.

Los dos Primeros Grammy para la Música Latina

El 28 de febrero de 1976 se realizó la 18va. edición de los Premios Grammy, durante la cual se introdujo una categoría dedicada a la música latina.

Para esa primera ocasión fueron nominados dos álbumes de jazz afrocubano: "Afro-Indio" de Mongo Santamaría y "Paunettto's Point" de Bobby Paunetto; una de balada: "Quiere ser mi amante" de Camilo Sesto y cuatro canciones de salsa: "Barretto" de Ray Barretto, "Live at Yankee Stadium, Vol. 1" de Las Estrellas de Fania, "The Good, The Bad and The Ugly" de Willie Colón, y "Sun of Latin Music" de Eddie Palmieri.

Aquella primera estatuilla fue otorgada a la producción de Palmieri, quién repitió la hazaña el 19 de febrero de 1977, en la 19va. edición de los premios, con "Unfinsihed Masterpiece", que se impuso a: "Cocinando la Salsa" de Joe Cuba, "El Maestro" de Johnny Pacheo, "La Gormé" de Eydie Gormé, "Salsa (Soundtrack)" de Las Estrellas de Fania, y "Sofrito" de Mongo Santamaría.

El detalle resaltable es que en ambos registros está presente la voz del, entonces adolescente Lalo Rodríguez, cuya tesitura estuvo a la altura de los magistrales arreglos musicales.

Y agreguemos que, en el primer disco, se incluye una composición suya, el bolero "Deseo Salvaje", con un mensaje muy tenso para ser escrito por alguien que, apenas, empezaba a vivir.

A partir de entonces, en torno a su voz y figura se construyó un fenómeno de la escena musical latina, dentro y fuera de los Estados Unidos, que se colocó al lado de intérpretes de inmensa estatura.

Machito y el toque juvenil

En la siguiente premiación de los Grammy, celebrada el 23 de febrero de 1978, Lalo volvió a estar vinculado. En esa ocasión no hubo grabación de Palmieri nominada; pero sí una donde el joven cantante de Carolina, Puerto Rico, nos volvió a regalar su voz. Se trata de "Fire Works" de la Orquesta de Machito.

El legendario cantante Frank Grillo, conocido como "Machito", había decido buscar el reconocimiento de la juventud setentera, sin que esto signifique dejar de lado su esencia, esa que marcó el sonido de las grandes bandas de los 50s. Aquella sinergia tiene respuesta en este trabajo donde la Orquesta de Machito agregó el canto fresco de Lalo, como representante de esa generación a la que pretendió impactar.

Eran tiempos en que grandes figuras de la música latina en Nueva York renegaba de la existencia de la salsa como nuevo concepto musical.

Por ejemplo, es de alto conocimiento las negaciones que en algunos momentos externaron Tito Puente y Celia Cruz. Contrario a estos, Machito, en "Fire Works", introdujo Soy salsero: "salsa somos salseros reconocidos en el mundo entero".

Ese tema y otro, "Despierta boricua", fueron interpretados por Machito; un tercero, "Macho", es instrumental. El resto, cinco, fueron cantados por Lalo, de los cuales tres son de su autoría.

El hecho de que su nombre aparezca en la portada refrenda este alegato. Encima de una fotografía de fuegos artificiales, se lee: "Machito Orchestra. Fire Works. Special guest artist Lalo Rodríguez".

Entre lo romántico y sensual

Los años 80s arrojaron un nuevo ciclo en la historia de la salsa. Músicos líderes de banda migraron al jazz latino, otros se montaron en la nueva ola. Así también lo hicieron muchos cantantes, entre los que figura Lalo, quien, desde la época de la llamada salsa brava, le hizo guiños a la temática de amor y desamor.

Para 1988, la casa discográfica TH publicó el álbum "Un Nuevo Despertar" de Lalo Rodríguez, donde se incluye el tema "Ven devórame otra vez", composición de Palmer Hernández que, con el tiempo se convirtió en símbolo de esa etapa de la salsa.

Lalo también lo fue, a partir de este éxito, llegaron más que fueron coreados y bailados donde quiera que la salsa cosechaba afectos: "Sí, te mentí" de Aníbal Pastor; "Voy a escavar tu cuerpo" de Mario Díaz; "Te estoy pidiendo" de Corine Oviedo y otros que abonaron a un repertorio que fue referente, que lo mantuvo en los escenarios hasta el final de su paso por este mundo.


Que este golpe de pecho sea la voz que clame una sincera disculpa y, al mismo tiempo, externarle gracias eternas por ser artífice de grandes momentos, esos que no fueron tomados en cuenta porque se los tragaron ciertas megalomanías.

Fueron muchas las luces, por eso es inaceptable matar la memoria. Se impone reanimarla y hacer referencia del sitio exclusivo que la historia de la salsa le tiene guardado.

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