Joe Biden y la relación de República Dominicana con Haití

Por Miguel Acevedo
Especial para Mi Tierra News

MIAMI, Florida - Jamás hablaré mal de un inmigrante, porque todo el que llega a otro país de manera transitoria o permanente tendrá sus razones. Estas pueden ser: Mala administración de gobiernos, invasiones de países fuertes a más débiles, corrupción sin límite por los grupos que controlan el Estado y una ambición que va dejando sin corazón a grupos enquistados en el estado como mala leche, forzando la migración de los ciudadanos.

Haití no es la excepción, aún con la pobreza que arrastra desde hace siglos. Pero los haitianos, con el coraje de hombres y mujeres trabajadoras, siempre están dispuestos a dar la vida para vencer el hambre, siempre dispuestos a superarse y lograr que sus hijos también se superen.

Pero la relación entre Haití y República Dominicana siempre será complicada y difícil, porque para una gran cantidad de dominicanos, en el tema migratorio haitiano hay mucho en juego, y a eso debemos añadir la fobia que un sector de la población dominicana está creando, en ocasiones para que el presente gobierno luzca mal y el miedo a que mañana dominicanos descendientes de haitianos se postulen a cargos electivos, como sucede en Estados Unidos.

Lo que no es sano ni juicioso es decir que el gobierno trata mal a los haitianos. República Dominicana es un país en desarrollo, que no cuenta con el transporte propio de un país desarrollado como Estados Unidos y las redadas que se hacen están dentro de las regulaciones migratorias, igual a las que se realizan en cualquier lugar del mundo.

En esta relación de República Dominicana con Haití ha entrado el gobierno de Estados Unidos, actualmente dirigido por los demócratas. Entiendo que antes de fijar una posición, el gobierno de Estados Unidos debió pensar que estamos en un mundo donde abundan las noticias falsas y que es posible que existan grupos interesados en crear las condiciones para malentendidos y están desarrollando acciones, que al final pueden alejar o dañar la imagen del presidente de Estados Unidos, frente a los votantes dominicanos, que tradicionalmente son demócratas.

Permanentemente el presidente Luis Abinader Corona ha pedido cooperación en los diferentes foros internacionales para ayudar a Haití.

La propuesta planteada por el gobierno de Estados Unidos para crear campamentos de haitianos en territorio dominicano, entiendo fue una sugerencia equivocada, porque dichos campamentos pueden crearse en territorio haitiano, custodiados por fuerzas de diferentes países.

Los presidentes Biden y Abinader tienen buenas intenciones con Haití, pero la responsabilidad de estabilizar a Haití no puede recaer exclusivamente en el gobierno dominicano, el cual lleva sobre sus hombros el peso de más de 2 millones de nacionales haitianos que hoy viven en República Dominicana.

Regresé recientemente de República Dominicana y en las calles vi haitianos vendiendo sus productos y caminando libremente. No vi detenciones en ninguna parte, aunque sé que las redadas se dan y que son inevitables.

Pero las bocinas que insultan y maldicen a los haitianos deben parar, porque con esas acciones pueden crear una imagen equivocada del gobierno y del presidente dominicano y esa no es la verdad.